La Savasana, o Postura del Cadáver, es una asana de relajación profunda y completa que se realiza al final de una práctica de Yoga. Aunque puede parecer sencilla, es una de las posturas más esenciales y poderosas para recargar el cuerpo y la mente. En este artículo, exploraremos cómo practicar la Savasana correctamente y cómo esta postura puede contribuir a tu bienestar general.
Ejecución de la Savasana
- Acuéstate en el Suelo: Acuéstate boca arriba en la esterilla, con las piernas extendidas y los brazos a los lados del cuerpo.
- Relajación de Cuerpo: Permite que todo tu cuerpo se relaje por completo. Cierra los ojos y relaja los músculos faciales.
- Conciencia de la Respiración: Lleva tu atención a la respiración. Observa cómo entra y sale el aliento de manera natural.
- Mantén la Quietud: Permanece en esta posición, sin moverte ni ajustar el cuerpo. Suelta cualquier tensión que puedas sentir.
Beneficios de la Savasana
- Recuperación Física y Mental: La Savasana permite que el cuerpo se recupere después de la práctica y que la mente se relaje.
- Reducción del Estrés: Al liberar la tensión acumulada, esta postura puede reducir los niveles de estrés y ansiedad.
- Conciencia Plena: La Savasana fomenta la conciencia plena y la observación de pensamientos y sensaciones.
- Renovación Energética: La quietud en la Savasana puede llevar a una sensación de renovación y frescura.
La Savasana es un regalo para ti mismo: un tiempo de descanso profundo y renovación. Aprovecha esta postura para desconectar del mundo exterior y nutrir tanto tu cuerpo como tu mente.