Desde la antigüedad, los filósofos humanos se han dado cuenta de la importancia de la mente en el gobierno de los asuntos humanos. Sabían que las circunstancias externas de una persona eran el resultado de sus pensamientos internos. Sabían que si la persona piensa en riquezas, tendrá riquezas, mientras que si los pensamientos son de pobreza, el éxito y el fracaso producirían los efectos correspondientes en las circunstancias de la persona. Hoy, la ciencia moderna ha reconocido la veracidad de estos hallazgos. Por lo tanto, se vuelve crucial para una persona controlar su mente.
El yoga tiene técnicas específicas que se ocupan de la ciencia del control mental. Estudiaremos la naturaleza de la mente como reconoce el yoga en este capítulo. Shankaracharya ha definido la mente de cuatro formas diferentes según sus funciones: manas para el trabajo de resolver y dudar; buddhi por la decisión y el juicio; asmita para la conciencia de su existencia individual y chita para recordar las experiencias anteriores. La Mente es una vasta colección de pensamientos y rastros de experiencias pasadas. Cuando naces, tu mente es la colección de samskaras acumulados sobre los nacimientos anteriores. Los samskaras, cuyos frutos ya se han disfrutado, han sido eliminados. Pero a medida que creces, se agregan continuamente nuevos samskaras debido a los diversos actos que realizas desde el nacimiento hasta la muerte.
El yoga reconoce cinco factores, básicos para la mente de cada persona. Se les llama kleshas porque son los antepasados de toda miseria humana. Ellos son: avidya, que es el conocimiento falso o la ignorancia del verdadero yo de uno en relación con los objetos; asmita o sentimiento de ego ya que en el yoga, el cuerpo y el alma son dos aspectos diferentes; raga es el gusto por la experiencia placentera; dvesha o aversión al dolor; abhinivesha o miedo a la muerte. El yoga comprende el comportamiento humano desde la perspectiva de estas cinco cualidades que se supone que están presentes en una persona desde su nacimiento y se consideran las impurezas de la mente. Hacen a una persona inestable y agitada. Por lo tanto, el yoga ha dejado paso a dhyana y pranayam para limpiar tu mente.
