Consejos para evitar lesiones por yoga

Consejos importantes para evitar las lesiones por yoga

Podrías pensar que el yoga es una práctica infalible. Que no hay forma de que te lastimes.

Desafortunadamente, ocurre lo contrario. Sin un poco de atención y prevención adecuadas, las lesiones por yoga pueden ser bastante comunes.

Protégete aprendiendo algunos consejos de expertos.

# 1 Escucha a tu cuerpo

Dependiendo de tu personalidad, tu instructor de yoga y tus compañeros de clase, puede ser fácil volverse un poco competitivo.

Empujar tu cuerpo demasiado en un día determinado puede resultar rápidamente en una lesión dolorosa.

Comprende que algunos días pueden ser mejores que otros. Tu sueño, dieta y concentración pueden afectar tu rendimiento.

En lugar de pensar “Hice esta pose la semana pasada” o “Juan está haciendo esta pose, necesito hacerlo mejor”, escucha lo que tu cuerpo te dice. Si es un día para esforzarse, entonces genial. Si es un día para reprimirse, reprímete.

# 2 Elige un instructor de yoga calificado

El yoga es extraordinariamente popular. Hay clases en casi cualquier comunidad del país. El vasto crecimiento del yoga significa un número creciente de instructores.

Sin embargo, no todos los instructores se crean por igual. Algunos son bastante hábiles. Otros, no tanto.

Los instructores no calificados o cuestionables pueden causar lesiones al empujar a los estudiantes demasiado lejos o al colocar sus cuerpos en posturas para las que no están listos.

Presta atención a la conducta de tu instructor. ¿Cómo maneja a los estudiantes principiantes? Además, revisa sus credenciales. ¿Cuánto tiempo llevan enseñando y de dónde obtuvieron su certificación?

# 3 Ve con calma

Todos comienzan a practicar yoga en el mismo lugar, como principiantes. Permítete ser un principiante y comenzar a practicar con facilidad.

Puede llevar algún tiempo encontrar el instructor y el tipo de yoga adecuados para tus necesidades y personalidad. Date tiempo para aprender y a tu cuerpo para adaptarse.

Además, dale a tu cuerpo tiempo para calentarse y enfriarse antes de la clase.

A medida que entras y sales de cada clase, le estás dando a tu cuerpo tiempo para adaptarse y hacer lo que le pides. Eso también significa adoptar posturas lentamente y salir de ellas también lentamente.

Por último, no intentes ir a una clase de yoga una vez a la semana o una vez al mes. Cuanto más tiempo le dés a tu cuerpo para aprender los movimientos y volverse flexible y fuerte, mejores serán tus clases. Y lo más importante, reducirás el riesgo de lesiones.

El yoga es maravilloso para tu cuerpo, mente y espíritu. Tómatelo con calma y evita lesiones para que puedas disfrutar de tu práctica durante todo el año.

Saludos!!!

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