Yama y Niyama: Las Piedras Fundamentales del Yoga
El yoga es más popular ahora que nunca. Artistas famosos y otras celebridades lo practican, y miles, o quizás millones, de personas están realizando ejercicios de yoga de una forma u otra. Sin embargo, a pesar de esta amplia popularidad, el yoga todavía se malinterpreta. Mucha gente piensa que el yoga es principalmente una actividad física, algo que pueden utilizar para poner su cuerpo en forma. Si bien es cierto que el yoga tiene un gran papel que desempeñar en el ámbito físico, el yoga es mucho más que esto.
El yoga, en su sentido más profundo, es la ciencia de la perfección humana. Es el medio por el cual una persona puede alcanzar su máximo desarrollo: físico, mental y espiritual.
La Importancia de la Conducta
Perfección humana? Esta es una tarea difícil. No se logra con solo unos pocos estiramientos de los muslos. Aunque el yoga tiene sus prácticas y ejercicios externos, su verdadero fundamento radica en la conducta adecuada. Una conducta adecuada significa vivir una vida que lo pondrá en armonía con la sociedad que lo rodea y con su propio ser interior.
Cuando comencé a practicar yoga, se lo conté a uno de mis amigos. Se interesó y quiso empezar. En ese momento no era profesor, así que le recomendé un libro. Me miró y dijo, con toda seriedad: “¿Dónde puedo robarlo?”
Bueno, no puedes comenzar a practicar yoga así, porque robar no es una forma de estar en armonía con la sociedad o contigo mismo. En el yoga, la conducta disciplinada o controlada se conoce por su término sánscrito, “samyama”, y esta conducta controlada tiene dos partes: “Yama” y “Niyama”.
Yama: La Disciplina Externa
En muchos libros de yoga, a veces se define a Yama como “abstinencias”, es decir, cosas que no debes hacer. Sin embargo, una mejor manera de entender Yama es pensarlo como una disciplina que te ayudará a encontrar la armonía con tu entorno externo.
Veamos brevemente las distintas partes de Yama:
- Ahimsa: Significa abstenerse de dañar a otros con pensamientos, palabras o acciones. Es esencial no hacer nada que pueda perjudicar a otros o bloquear su progreso físico, mental o espiritual.
- Satya: Se refiere a la veracidad. Todo lo que pensemos o digamos debe hacerse con el espíritu de ayudar a los demás. Es importante ser honestos, pero también ser sensibles a cómo nuestra verdad puede afectar a otros.
- Asteya: Significa no robar. No debemos tomar lo que pertenece a otros ni privar a otros de lo que se les debe.
- Brahmacarya: Literalmente significa “permanecer apegado a la Conciencia Suprema”. Se trata de tratar a cada entidad viviente como una expresión de lo divino.
- Aparigraha: Se define como la no acumulación de objetos físicos que son superfluos para nuestras necesidades. Es importante vivir de manera simple y no aferrarse a lujos innecesarios.
Niyama: La Disciplina Interna
Al igual que Yama, Niyama también se compone de cinco principios. Practicar estos cinco te ayudará a lograr la armonía interior. Brevemente, son:
- Shaoca: Significa limpieza y pureza. Mantén limpio tu entorno y puros tus pensamientos. “La limpieza está al lado de la piedad”.
- Santosha: Es la alegría mental. Trabaja duro y haz lo mejor que puedas, pero también mantente satisfecho con lo que tienes.
- Tapah: Se refiere a la práctica de la penitencia para alcanzar metas. Implica ayudar a los demás y asumir algunas de sus cargas.
- Svadhyaya: Es el estudio y la verdadera comprensión de la literatura edificante. Busca la compañía de personas espirituales y aprende de su experiencia.
- Iishvara Pranidhana: Significa refugiarse en el controlador del universo a través de la meditación diaria sobre el objetivo final de la vida.
En los próximos artículos de esta serie, explicaré cada parte de Yama y Niyama con más detalle. Comprender y practicar estas disciplinas es fundamental para cualquier persona que desee profundizar en su práctica de yoga y en su viaje hacia la autorrealización.
