Conceptos básicos de la meditación: contar respiraciones no es como contar ovejas.

¿Por qué contar respiraciones no es como contar ovejas en la meditación?

“Sólo cierra los ojos y cuenta tus respiraciones”, dicen. ¿Qué tan simple puede ser? “No pienses en nada más. Solo concéntrate en tu respiración.” Sin embargo, cualquiera que haya intentado esta meditación “simple” sabe que no es tan fácil.

¿Cuáles son los obstáculos comunes al contar respiraciones?

Hay muchos obstáculos que pueden interponerse en esta tarea aparentemente sencilla. Nuestras mentes tienden a divagar de forma natural. Cuando intentamos concentrarnos completamente en algo durante más de unos segundos, los pensamientos aleatorios tienden a tomar el control. Además, seamos sinceros: respirar puede parecer aburrido. ¿Cómo puedes concentrarte en algo tan mundano cuando hay tantas cosas más interesantes dando vueltas en tu cabeza?

¿Cómo es una sesión típica de meditación al contar respiraciones?

Una sesión típica podría ser así: cierro los ojos, me siento cómodamente y empiezo a contar. Inhalo uno, inhalo dos, inhalo… “¿Estoy haciendo esto bien? Supongo que sí. Ya estoy en… oh, tres”. Inhalo cuatro… “¿Se supone que debo empezar de nuevo en uno o simplemente seguir adelante?” Inhalo uno, inhalo dos, inhalo tres, inhalo cuatro. “Wow, realmente estoy entendiendo esto. Vaya”. Inhalo uno, inhalo dos… “¿Me acordé de pagar la factura del teléfono? Estoy seguro de que sí. Soy muy bueno controlando mis facturas. No como Susan, ella siempre… Maldita sea, lo hice de nuevo.” Inhalo uno, inhalo dos…

¿Cómo mejorar la concentración durante la meditación?

La buena noticia es que mejora con la práctica. La mala noticia es que todavía puede ser un desafío para los meditadores experimentados, especialmente durante períodos ocupados o turbulentos de la vida. Afortunadamente, hay algunas estrategias que pueden ayudar a mejorar la concentración y reducir la frustración durante la meditación. Aquí hay tres consejos:

1. ¿Por qué observar y no controlar la respiración?

No fuerces ni intentes controlar tu respiración. Este es un error común entre los principiantes. Muchos meditadores sin experiencia tienden a alterar consciente o inconscientemente su respiración en un esfuerzo por concentrarse en ella. El resultado es un patrón de respiración irregular, que puede inhibir tu meditación.

En lugar de eso, observa tu respiración. No necesitas hacer un esfuerzo adicional. Si simplemente esperas y observas, tu cuerpo respirará naturalmente. Si te das cuenta de que estás controlando tu respiración, recuérdate suavemente que no es necesario y permite que la próxima respiración sea natural.

2. ¿Por qué es importante ser compasivo contigo mismo?

La compasión es clave en tu práctica de meditación. Es normal que tu mente divague; lo importante es no reprimirse cuando esto ocurre. El tiempo que dediques a criticarte solo te aleja de la meditación. Regresa a tu práctica tan pronto como notes que te has distraído. No te desanimes pensando: “No puedo hacer esto. Esto nunca va a funcionar para mí”. Esos pensamientos negativos no ayudan en nada y solo ocupan tiempo valioso. Sé compasivo contigo mismo y vuelve a tu meditación.

3. ¿Por qué disfrutar de la práctica es esencial?

La última estrategia es disfrutar de tu práctica. Aunque la meditación puede ser difícil a veces, su práctica diaria puede mejorar tu vida de manera significativa. No te autoevalúes constantemente ni esperes progresar en un tiempo determinado. Recuerda que esta es una experiencia de por vida. Permite que tu tiempo de meditación sea un oasis, no una tarea. No importa qué más esté sucediendo en tu vida, tu tiempo de meditación puede ser tu escape.

Como dijo una vez un maestro zen: “Solo eres tú y tu respiración”. Inhala, exhala y olvídate del mundo que te rodea. Incluso si solo puedes encontrar diez o quince minutos para estar a solas con tu respiración, disfrútalo.

¿Cómo afecta la práctica de la meditación a tu vida?

Espero que estos consejos te ayuden a mejorar tu experiencia de meditación. A lo largo de los años, han demostrado ser invaluables en mi propia práctica. Por supuesto, todavía lucho de vez en cuando con los mismos problemas. Sin embargo, al observar en lugar de controlar, ser compasivo conmigo mismo y disfrutar de mi tiempo a solas, he logrado que mi vida sea más plena y feliz.

Así que, ¿por qué no intentas contar tus respiraciones de una manera diferente? La práctica de la meditación puede ser transformadora si te permites ser paciente contigo mismo y disfrutar del viaje.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.