¿Cómo crear una sala de meditación en casa?
Una vez que has tomado la decisión consciente de meditar, el siguiente paso es actuar. Si has optado por meditar en casa, necesitarás un espacio donde ocurra la magia de la meditación. Crear un entorno adecuado es fundamental para poder concentrarte y conectar contigo mismo.
Es común que tratemos de sabotearnos con excusas sobre por qué no deberíamos hacer algo. Sin embargo, una vez que te comprometes a hacer de la meditación parte de tu vida, esas excusas dejarán de existir.
¿Cómo elegir el espacio adecuado para meditar?
Elige una habitación de tu casa y declara que ese espacio será tu nuevo espacio de meditación. Si vives con familiares, es importante hablar con ellos y explicarles que dedicar una o dos veces por semana a este espacio te ayudará a lograr el objetivo de la calma y la paz.
Si tu familia entiende que tu transformación personal también les beneficiará, estarán más que felices de complacerte en esta elección.
¿Qué hacer si no tengo una habitación exclusiva para meditar?
Si no tienes la opción de contar con una habitación solo para ti, no dejes que eso te detenga. Puedes elegir un pequeño rincón en una habitación que sirva como tu espacio de meditación. Incluso tu propia habitación puede ser un lugar maravilloso para crear tu refugio personal.
¿Qué elementos necesitas para crear tu sala de meditación?
No importa si tu espacio es una habitación completa o un pequeño rincón en tu dormitorio, puedes crear el ambiente perfecto para meditar. Para ello, necesitarás:
- Un espacio sin distracciones
- Un lugar que te represente y te defina
- Un sitio donde te sientas cómodo
- Una alfombra o cojín cómodo
- Elementos que favorezcan la relajación
¿Cómo decorar tu espacio de meditación?
Elige un lugar que tenga la menor cantidad de distracciones posible, preferiblemente donde no haya un teléfono. Decora tu espacio de manera que te defina y te llene de energía positiva. Por ejemplo, si tu color favorito es el azul, una estera de yoga o un cojín en ese color pueden ser excelentes adiciones.
Si disfrutas de viajar, puedes colocar algunas fotos de tus destinos favoritos para inspirarte mientras meditas.
¿Qué más necesitas para sentirte cómodo durante la meditación?
Asegúrate de que tu espacio sea lo más cómodo posible. Un cojín de piso grueso y una almohada suave detrás de la espalda son ideales para comenzar tu práctica de meditación. Si tu estera no es cómoda, será difícil que te relajes y te concentres.
¿Qué tipo de ambiente debes crear?
Si deseas meditar con música relajante, considera adquirir un CD con este tipo de melodías, manteniéndolo a un volumen lo suficientemente bajo para no distraerte. También puedes encender un poco de incienso o algunas velas aromáticas para crear un ambiente propicio para la meditación.
Una vez que hayas diseñado tu espacio o habitación basándote en la idea de la relajación, notarás que querrás correr a ese lugar para practicar el arte de la meditación. Tu sala de meditación se convertirá en un refugio tan atractivo que no podrás esperar para utilizarla.
Conclusión
Crear una sala de meditación en casa es un paso esencial para profundizar en tu práctica de meditación. Un entorno adecuado no solo te ayudará a concentrarte mejor, sino que también hará que cada sesión sea más placentera y transformadora. Así que tómate el tiempo necesario para diseñar un espacio que te inspire y te ayude a conectar contigo mismo.