La puerta estrecha: elegir la forma correcta de vida
Durante miles de años de tradición en nuestro mundo, la mayoría siempre gobierna. La gente común decide y los pocos se quedan atrás. Desde la crucifixión de Cristo en la cruz hasta la elección de la mayoría de los líderes del mundo de hoy, siempre es la mayoría de los votos la que se convierte en la causa. La buena elección es la elección de la gente común. Pero, ¿podemos realmente confiar en la elección de la gente común?
Bueno, para responder a esa pregunta, he enumerado algunos hechos que describen a la gente común:
- Hecho 1: Mentir es común en las personas.
- Hecho 2: La mayoría de la gente anhela dinero y fama.
- Hecho 3: La mayoría de la gente está orgullosa.
- Hecho 4: La gente común carece de paciencia.
- Hecho 5: El amor verdadero es raro en la gente común.
- Hecho 6: La sabiduría es poco común para las personas.
Esos hechos son innegables. Sin embargo, no estoy concluyendo que la elección común sea siempre una mala elección. A veces, la elección común toma la decisión correcta, especialmente cuando está dirigida o influenciada por pocas personas extraordinarias. Sin embargo, la grandeza y la buena virtud solo se encuentran en pocas personas, y la confiabilidad no es absoluta en la mayoría de las personas.
La importancia de las decisiones
Todos necesitamos decisiones para cambiar o continuar con nuestras vidas. Una buena decisión nos traerá éxito, mientras que una mala decisión nos traerá tragedia. Al tomar una decisión, es muy importante saber qué es una decisión correcta o incorrecta. La mayoría de las personas siguen la decisión común, mientras que otras optan por decisiones inusuales. Si nos basamos en la verdad oculta detrás de las palabras de la gente, la mayoría elegiría el dinero y la fama en lugar del amor. Elegirían la facilidad en lugar de las dificultades. Elegirían el orgullo en lugar de la humildad.
La vida como una elección
La vida es una decisión que tomar. Es una puerta para entrar y un camino para caminar. Hay dos tipos de decisiones que una persona puede elegir: la decisión difícil y la decisión fácil. En la mayoría de los casos, las decisiones difíciles son las correctas, pero la mayoría de las personas no las eligen debido a sus dificultades. A la mayoría de la gente le gusta la tranquilidad y odia los sacrificios. Por eso no tienen éxito en sus vidas.
Un ejemplo de una decisión difícil es amar de verdad. El verdadero amor está lleno de sufrimientos y sacrificios. Debido a esto, la mayoría de la gente evita el amor verdadero para evitar los dolores. Pero lo que no se dan cuenta es que están evitando la grandeza y la justicia de la vida. La dificultad hace que la vida sea real y el amor verdadero hace que la vida sea grandiosa.
Las puertas de la vida
En la vida, también hay dos tipos de puertas que debemos elegir para entrar. Hay una puerta ancha por la que la mayoría de la gente entra debido a su facilidad y conveniencia. También hay una puerta estrecha a la que solo entran unos pocos debido a sus dificultades y sacrificios.
La puerta ancha ofrece comodidad, fortuna y fama. En la puerta ancha casi no hay reglas ni leyes a seguir. Puedes simplemente mentir, jactarte y usar cualquier cosa. Es una puerta tan majestuosa y decorativa, colorida como los casinos y clubes nocturnos. Es por eso que mucha gente se siente atraída a entrar por la puerta ancha.
Por otro lado, la puerta estrecha está llena de dolores y sacrificios, lo que hace que solo unas pocas personas entren. Estas personas son temerosas de Dios, perseverantes y humildes. Son disciplinadas y poseen la virtud de la honestidad y la bondad. Debemos elegir la puerta correcta para nuestras almas y pasar por el camino adecuado para la supervivencia de nuestra alma.
La elección es tuya
Debemos esforzarnos por pertenecer a las pocas personas que entran por la puerta estrecha. Recuerda que la mayoría de la gente miente y se enorgullece. Lo que tenemos que hacer es convertirnos en personas extraordinarias, más allá de las personas habituales que son orgullosas y mentirosas. Debemos aspirar a ser grandes y heredar la verdadera vida, así como el reino de nuestro Dios Todopoderoso. No obstante, la elección sigue siendo tuya. ¿Dónde querrías entrar? ¿La puerta ancha que ofrece facilidad? ¿O la puerta estrecha que presenta dificultades?