Cuando se plantea el comienzo de la practica de una disciplina como el Yoga suele pensarse que se necesitará una gran flexibilidad previa.
Esto suele desanimar a muchos principiantes que encuentran interesante el Yoga pero su percepción es errónea.
En realidad el Yoga acepta a cualquiera que desee seguir su camino. Lo único que pide es perseverancia paciencia y constancia en su practica. A cambio te compensará con beneficios que te sorprenderán como flexibilidad, fuerza o resistencia.
La flexibilidad
La flexibilidad se considera un ‘subproducto’ de la práctica de Yoga, pero en el caso de Yoga con silla, a menudo se “minimiza” o se da por sentada.
Dado que la mayoría de los entusiastas del Yoga con silla son personas mayores, el verdadero valor de la flexibilidad es la movilidad.
Cuando consideras que la movilidad para las personas mayores puede ser la diferencia entre la dependencia y la independencia, la flexibilidad alcanza gran valor.
La movilidad media de un anciano es mayor en las caderas, la columna vertebral, las muñecas y los hombros.
Pero el simple acto de cruzar las piernas puede ser difícil para las personas que han alcanzado una edad avanzada.
Los estudiantes de las clases de Yoga con silla aprenden una variedad de ejercicios que ‘liberarán’ muchas de las articulaciones principales.
Muchos estudiantes también comentan cómo el dolor, a partir de una variedad de dolencias, es mucho más manejable, después de practicar Yoga con silla.
El mayor rango de movimiento hace la diferencia. También ayuda a prevenir lesiones que pueden ocurrir por tensión o una posible caída. Si un anciano se cae, sin duda existe la posibilidad de que los resultados puedan poner en peligro su vida.
El equilibrio
El Yoga con silla ofrece una cantidad significativa de ejercicios de equilibrio.
El equilibrio puede verse afectado por la medicación, los problemas del oído interno y demás.
Muchas personas mayores muestran una gran mejoría en el equilibrio de sus cuerpos a las pocas semanas de su primera clase de yoga con silla.
Por lo tanto, la flexibilidad y el equilibrio son una parte importante de un paquete de ‘prevención de lesiones’ que puede aumentar o mejorar la calidad de vida de las personas mayores.
Este hecho pueden corroborarlo las personas mayores que acuden a las clases de Yoga con silla, diaria o semanalmente.
La necesidad de practicar con frecuencia
La mayoría de nosotros nos damos cuenta de que el condicionamiento físico no es el único factor involucrado en la dependencia. Hay una serie de enfermedades incapacitantes que pueden afectar a cualquiera de nosotros y no tienen nada que ver con la falta de flexibilidad.
Esta falta de flexibilidad no es el único factor primordial involucrado en la independencia de las personas mayores.
Sin embargo, es un hecho que las personas mayores al ser menos móviles y más débiles quedarán confinadas en camas o sillas de ruedas a causa de la poca amplitud de movimientos que poseen por su incapacidad.
Por lo tanto, la mayoría de las personas mayores deberían esforzarse por mantenerse flexibles, ya que lo que está en juego en última instancia es su propia dignidad.
Puedes ver el cuidado de tu condición física como una póliza de seguro para la vida independiente.
Después de todo, ¿quién quiere en realidad imponer su presencia a sus hijos o parientes al final de su existencia?
Saludos
Siguiente: Beneficios del yoga con silla – Parte 4 – Terapia social