Eso NO es yoga, si uno come así
En la actualidad, el yoga se ha popularizado como una práctica de bienestar integral que combina el ejercicio físico, la meditación y la conexión con uno mismo. Sin embargo, es fundamental entender que el yoga no se limita solo a las posturas. Un aspecto crucial que muchas personas pasan por alto es la importancia de la alimentación en la práctica del yoga.
La relación entre yoga y dieta
Si alguien sale de una clase de yoga y luego decide comer en un lugar de comida rápida, es posible que esté desperdiciando los beneficios de su práctica. El yoga, en su totalidad, incluye una dieta adecuada. Este es un factor que debe comprender cualquier persona seriamente interesada en el yoga. Para experimentar los verdaderos beneficios del yoga, es esencial adoptar un enfoque holístico que incluya hábitos alimenticios saludables.
Cuando comencé a practicar yoga hace unos seis años, realicé una investigación sobre la conexión entre la dieta y el yoga. Durante este tiempo, me topé con el libro “El libro ilustrado completo de yoga” de Swami Vishnu-Devananda, que tiene un capítulo completo sobre la dieta. Este texto dejó claro que, aunque las posturas de yoga son beneficiosas para la salud, si uno se alimenta de manera poco saludable, se frustra el propósito de hacer ejercicio.
Los principios del yoga
El yoga es más que un ejercicio físico; es una práctica espiritual que abarca la meditación y la respiración. La energía que se activa en esta práctica está relacionada con el Kundalini, una fuerza vital que reside en la base de la columna vertebral. Esta conexión espiritual se ve afectada por lo que comemos. Recuerda que somos seres físicos que viven en un mundo espiritual.
La famosa ley cósmica dice: “Eres lo que comes”. Esta afirmación refleja la importancia de la alimentación en nuestra existencia física y espiritual. Al practicar yoga, es recomendable prestar atención a la dieta, tal como lo han sugerido maestros y gurús del yoga como Swami Sivananda y BKS Iyengar.
La dieta Sáttvica
La alimentación que complementa la práctica del yoga se conoce como dieta Sáttvica. Esta dieta incluye frutas, raíces y verduras de hoja (ya sean crudas o adecuadamente cocidas). Al seguir este tipo de alimentación, se promueve la pureza del cuerpo y la mente, lo que es esencial para la práctica del yoga.
Swami Sivananda afirmó: “Por la pureza de los alimentos sigue la purificación de la naturaleza interior”. Este enfoque destaca la conexión entre lo que consumimos y nuestra práctica espiritual. Además, el yoga tiene un efecto adverso en nuestras fuerzas espirituales si no cuidamos lo que ingerimos.
Beneficios de una buena alimentación
Adoptar una dieta equilibrada y saludable no solo beneficia la práctica del yoga, sino que también mejora la salud en general. La alimentación adecuada ayuda a prevenir enfermedades y a mantener el cuerpo en óptimas condiciones. Por lo tanto, si deseas experimentar todo lo que el yoga tiene para ofrecer, recuerda incluir la dieta como uno de sus principios fundamentales.
Algunos estudios han demostrado que los atletas y culturistas que siguen una dieta Sáttvica tienen un mejor rendimiento y una recuperación más rápida. Personajes como Stephen Arlin, David Wolfe, Scott Brodie y Bill Pearl (cuatro veces ganador del concurso Mr. Universo) han sido ejemplos de cómo una dieta saludable puede potenciar cualquier práctica de ejercicio.
Conclusión
Si realmente deseas disfrutar de todos los beneficios que el yoga tiene para ofrecer, es fundamental considerar la alimentación como parte integral de tu práctica. Un cambio en tus hábitos alimenticios puede transformar no solo tu bienestar físico, sino también tu bienestar espiritual.
Recuerda, tu amigo en el espejo te agradecerá que lo hayas hecho. ¡Cuida tu cuerpo, cuida tu mente y practica el yoga en su totalidad!
En amistad,
Foras Aje